Tres suboficiales de la comisaría Nicolás Alcázar, en el distrito de El Porvenir (Trujillo), fueron detenidos por sus colegas de la Policía Nacional, tras ser acusados de exigir una coima de mil soles a un conductor. El hecho es investigado como presunto delito de concusión.
Abren investigación
El jefe de la región policial La Libertad, general PNP Guillermo Llerena, confirmó que fue la misma institución la que procedió con la denuncia y captura de los implicados. “No vamos a proteger a malos elementos que manchan nuestro uniforme. Ellos ya están a disposición de la justicia”, declaró.
Los agentes investigados fueron identificados como Jean Carlos Gutiérrez Pastor (29), Edwin Anthony Huarniz Valle (31) y Yeminson Junior Malca Hernández (33), quienes habrían intervenido irregularmente a un chofer acusándolo falsamente de conducir un vehículo robado. Los tres fueron trasladados a la Unidad de Flagrancia de El Porvenir, donde se les investiga por concusión.
El caso
Según el testimonio del denunciante, todo ocurrió cuando conducía su vehículo por una calle del distrito zapatero de El Porvenir. Fue allí donde fue intervenido por tres suboficiales que, sin justificación clara, lo acusaron de estar manejando un auto robado.
Respuesta inmediata
Tras conocer la denuncia, la propia Policía, a través del área Anticorrupción, montó un operativo y procedió a la captura de los tres agentes, todos pertenecientes a la comisaría Nicolás Alcázar. Los implicados, que ostentan el grado de suboficiales de tercera, fueron trasladados de inmediato a la Unidad de Flagrancia del Ministerio Público para las diligencias correspondientes.
Se les investiga por el presunto delito de concusión, una forma de corrupción en la que un funcionario público abusa de su cargo para exigir beneficios económicos indebidos.
No los apoyarán
El general PNP Guillermo Llerena, jefe de la III Macro Región Policial La Libertad, fue enfático al condenar el accionar de los agentes involucrados. En declaraciones a la prensa, aseguró que la institución no protegerá a quienes deshonren el uniforme policial.
“Nosotros no vamos a encubrir a estos malos elementos que manchan nuestro sagrado uniforme. Apenas tomamos conocimiento del hecho, presentamos la denuncia correspondiente y procedimos con la detención. Cada uno es responsable de sus actos y responderá ante la justicia”, sostuvo la autoridad.
La de siempre
Este caso vuelve a poner sobre la mesa los cuestionamientos sobre la integridad de algunos miembros de la Policía Nacional en el ejercicio de sus funciones. Aunque se trata de una minoría, hechos como este dañan la imagen de toda una institución y socavan la confianza ciudadana.
Las autoridades del Ministerio Público ya iniciaron las investigaciones preliminares para determinar la responsabilidad de los detenidos, mientras que la Inspectoría General de la PNP podría iniciar un proceso disciplinario paralelo.
