La gerente de Fiscalización de la MPT, Vicky Mori, informó que se ha dispuesto una intervención integral que involucra a las áreas de Salud, Policía Municipal, y Gestión Ambiental, con el objetivo de garantizar la inocuidad de los alimentos que se expenden en los principales centros de abasto de la provincia.
Atentado a la salud pública
“No vamos a permitir que se juegue con la salud de la población. Se ha dispuesto reforzar la vigilancia sanitaria en todos los mercados y centros de acopio de carne. Los comerciantes deben contar con los permisos correspondientes y acreditar el origen legal y sanitario de sus productos”, precisó la funcionaria.
El anuncio se realizó luego de que un operativo conjunto entre la Gerencia de Fiscalización, la Policía Nacional y el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) permitiera intervenir un inmueble en el distrito de El Porvenir, donde se halló carne equina almacenada en condiciones insalubres. El producto no contaba con certificados veterinarios ni registros sanitarios, y era distribuido a diversos puntos de venta en la ciudad.
Durante la intervención se decomisaron varios kilos de carne y se procedió a clausurar el establecimiento, además de iniciar un proceso sancionador contra los responsables. La MPT informó que estos hechos constituyen una falta grave contra la salud pública, y podrían derivar en denuncias penales por comercialización de productos no aptos para el consumo humano.

Todos alertas
La gerente, también hizo un llamado a los comerciantes y consumidores a denunciar cualquier actividad sospechosa o irregular, recordando que la manipulación y venta de carne sin control sanitario representa un riesgo alto de transmisión de enfermedades.
“Los trujillanos deben exigir que la carne que compran provenga de camales autorizados y cuente con los sellos de control sanitario. Estamos trabajando para erradicar este tipo de prácticas que ponen en peligro la salud y la confianza de los consumidores”, añadió.
La Municipalidad adelantó que los operativos se mantendrán de forma permanente y se extenderán no solo a mercados, sino también a restaurantes, chifas y locales de comida rápida, donde se sospecha que podría estar llegando carne de procedencia dudosa.






