Al cumplirse un año de las protestas contra el gobierno de Dina Boluarte que dejaron 18 fallecidos en la ciudad de Juliaca, región Puno, la población acató un paro cívico de 24 horas en memoria de las víctimas.
La jornada de lucha y homenaje fue impresionante y totalmente pacífica. Miles de personas, entre los que estaban los familiares de las víctimas y heridos de las marchas, llegaron de las diferentes provincias y regiones, para conmemorar este fatídico episodio de la historia contemporánea del Perú.
En Juliaca, las actividades se iniciaron a las 9 de la mañana con una misa por los 18 asesinados, la misma que se hizo en quechua y aymara. En el acto litúrgico también se recordaron a los 6 soldados que perecieron ahogados en el río Ilave por negligencia de sus superiores; además del policía José Luis Sonqo, asesinado por un ex policía.
Luego del izamiento de la bandera a media asta, se iniciaron las movilizaciones multitudinarias. No hubo servicio de transporte urbano, y la policía hizo notoria su ausencia.
Duelo provincial y monumento
El gobernador regional de Puno, Richard Hancco Soncco, declaró duelo regional los días 8 y 9 de enero, como acto de reconocimiento y conmemoración a ciudadanos quechuas y aimaras fallecidos durante las protestas. Asimismo, exhortó a realizar el izamiento de bandera a media asta en señal de duelo provincial y regional.
Como parte de la conmemoración, se construyó un monumento para honrar a los fallecidos en las protestas antigubernamentales.
A la ceremonia de develación del monumento también asistieron los familiares de otras víctimas de la represión policial y militar, entre ellos ciudadanos de Ayacucho.
«Sé que no habrá palabras de consuelo para el dolor que ustedes llevan en su corazón y la impotencia de no tener justicia hasta ahora«, sostuvo, al iniciar su discurso, la regidora de la Municipalidad Provincial de Puno Eliseny Vargas.
Otro acto que resaltó fue el paseo de las fotografías y nombres de los cinco congresistas por Puno. Estos fueron colocados en los lomos de unos burros, con la inscripción de TRAIDOR.
