Resulta que a doña Dina Bolarte todo le viene de bajada. Hasta se podría decir que todo lo que luce es regalado. A los Rolex y joyas, ahora se suman los regalos de ‘Chibolín’, entre ellos el vestido amarillo que lució en su juramentación como Presidenta.
Esta revelación la hizo el empresario Henry Shimabukuro, exasesor del ex presidente Pedro Castillo. Inmediatamente, la dama del rostro renovado respondió furibunda y el viernes 4 envió una carta notarial en la que pedía una rectificación en un plazo de 48 horas, bajo advertencia de “iniciar acciones civiles y penales para defender su derecho al honor y buena reputación”.
Otro que metió su cuchara fue el ministro de Salud, César Vásquez, señalando que ni él ni otro ministro habían escuchado rumores del acercamiento entre su jefa y ‘Chibolín’, y exigió que se presenten pruebas antes de lanzar acusaciones.
Toma mi… entras
Cuando todos pensaban que Shimabukuro se iba a achicar, éste sorprendió con una carta que es un deleite para los amantes de los golpes bajos. En ella ratifica la bomba de que el reo Andrés Hurtado le entregó regalos a la mandataria, incluido el sastre amarillo que lució durante la ceremonia de asunción a la Presidencia.
El empresario, en su misiva, desafía a Boluarte a exhibir sus boletas de compra. “Me ratifico en mi declaración original y sin edición de la entrevista brindada al programa Ocurre Ahora (…) por ello, la reto públicamente a mostrar las boletas de compra del ‘ajuar’ utilizado en su juramentación y otros. Esa muestra de transparencia aclararía cualquier duda”, se lee en la carta difundida por RPP.
Shimabukuro dijo que la carta notarial que le enviaron contenía su apellido mal escrito, tenía errores gramaticales y carecía de formalidades, por lo que pedía que Boluarte la reenvíe correctamente.
“No debería responder (…) pero tratándose de usted lo hago como un ciudadano más de ese 95% que la repudia y la asquea (…) su imagen no podría verse más afectada o dañada. Su comportamiento como mandataria, sumado a recibir Rolex, joyas y sabe Dios qué otras cosas (…) destruyó su credibilidad; la población la detesta”, señaló.
En la misma entrevista, Shimabukuro afirmó que Grika Asayaq, exasesora presidencial, tuvo múltiples accesos a la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI) que coincidieron con visitas de Andrés Hurtado ‘Chibolín’.
