Un nuevo escándalo ha vuelto a golpear la institución policial en Trujillo. Chats de Whatsapp revelan conversaciones de efectivos con el delincuente Esneider García Burgos, alias «Taba», acusado de secuestro y extorsión. En los mensajes se evidencian presuntos acuerdos ilícitos y negociaciones delictivas.
Las conversaciones fueron halladas tras la captura de «Taba» en noviembre del año pasado. En ellos, se menciona la supuesta complicidad de agentes de la comisaría La Noria, en Trujillo, quienes habrían recibido beneficios como el pago de Netflix, además de coordinar una posible extorsión relacionada con terrenos.
Alias «Taba» es señalado como presunto miembro de la organización criminal «Los Pulpos», que fue detenido tras ser acusado de estar implicado en la extorsión de la viuda de Santos Guillermo Sánchez Vera, un empresario minero cuyo cuerpo fue encontrado con una frase en el pecho que decía «Por no pagar completo».
En los diálogos entre los agentes y García Burgos se evidencia la coordinación de la entrega de dádivas y la ejecución de actos delictivos en la ciudad. Se leen así mensajes sobre presuntos acuerdos para que «Taba» pague a los agentes el servicio de streaming Netflix para ver películas en la comisaría, así como la coordinación de un aparente acto para amedrentar a una mujer.
«No le veo la necesidad de meterle plomo, solo hay que asustarla, nada más», dice el mensaje que habría mandado uno de los policías a García Burgos.
Ministerio del Interior se pronuncia
Tras estos hechos, el Ministerio del Interior emitió un comunicado en el indicó que el titular de la cartera, Juan José Santiváñez, dispuso que la Inspectoría General de la Policía Nacional inicie una investigación contra los agentes implicados.
En dicho comunicado se exige además la separación de los agentes acusados. Cabe indicar que estos policías no estaban dentro de la lista de los 100 policías rotados, según reciente disposición de la PNP.
