Alberto Fujimori siempre clamó piedad cuando estuvo privado de su libertad. Solía difundir videos y fotos donde se le veía con aspecto de moribundo abandonado. Y era muy común verlo saliendo a la clínica, evadiendo esporádicamente su prisión de lujo.
Esta situación fue fundamental para que el ex presidente Pedro Pablo Kuczynski le otorgue el indulto humanitario en el 2017, el mismo que fue revocado, pero una orden del Tribunal Constitucional lo restituyó en diciembre pasado.
Compañero oxígeno
El ex dictador ha empezado a dejarse ver en público, siempre acompañado de un balón de oxígeno conectado a su cuerpo por una cánula nasal.
Sin embargo, el programa La Encerrona acaba de difundir una fotografía donde se le ve al ex reo departiendo alegremente en un almuerzo, acompañado por su, también condenado, hijo Kenji. Y, vaya sorpresa, sin su fiel compañero oxígeno.
Según ese programa, el almuerzo se desarrolló en una residencia de La Planicie, en La Molina, el último viernes. A Fujimori se le ve al aire libre, con una camisa manga corta.
No han faltado quienes han considerado esto como una burla a la justicia. Porque se le otorgó el indulto por su estado de salud; máxime si últimamente anda declarando sobre cuestiones políticas y sobre el futuro del partido fujimorista, lo que indica que está en perfecto estado.
Otros burladores de la justicia
Otros acusados de corrupción que se burlan de la justicia, alegando edad y estado de salud, son Susana Villarán, a quien el programa de televisión Panorama la sorprendió dándose un refrescante chapuzón en la piscina de la casa donde vive.
Según La República, los ex militares Edwin Donaire, sentenciado por robo de gasolina; y los generales Julio Salazar Monroe y Juan Rivero Lazo, sentenciados por su participación en la matanza de La Cantuta, cumplen su condena en la comodidad del Hospital Central Militar, en habitaciones de un pabellón exclusivo para generales.