No le importó nada. Ni las críticas de los deportistas ni el pronunciamiento de la Federación Peruana de Atletismo, que rechazó en la previa la intención del alcalde de Trujillo, Arturo Fernández, de arrancar el grass natural del Estadio Chan Chan para colocar grass sintético. Esta mañana ingresó maquinaria al estadio para empezar los trabajos en medio de una ola de cuestionamientos.
Estos trabajos, tal como lo han advertido los deportistas, son un despropósito porque perjudican la práctica del atletismo. Los deportistas se encontraban por estos días justamente preparándose en el Estadio Chan Chan a fin de participar en los Juegos Olímpicos 2024.
La práctica de los deportistas en este estadio involucra el lanzamiento de disco y de martillo. Según lo que han manifestado, la implantación de grass sintético los obligará a buscar otro campo para poder seguir con sus prácticas.
En medio de las sombras
Pero el daño que esto significa al deporte trujillano no es lo único. La obra del grass sintético en el Estadio Chan Chan se está ejecutando en medio de la más completa falta de transparencia.
Lo que se conoce hasta ahora, según los datos objetivos, es que se trata de una orden de servicio de fecha 5 de diciembre, por la suma 1 millón 800 mil soles a favor de Contratista SK.
El primer regidor y llamado a reemplazar a Arturo Fernández en la alcaldía tras su suspensión, Mario Reyna, cuestionó recientemente esta adjudicación hecha de modo directo. «No tiene proceso de licitación», denunció.
Como se recuerda, Reyna fue hace poco agredido en medio de una bronca con los contratistas en el lugar de los hechos.
