El 4 de mayo de 2021 marcó un antes y un después en la carrera política de Arturo Fernández Bazán, hoy alcalde vacado de Trujillo. En una visita a la comisaría de Moche para presentar una denuncia, Fernández protagonizó un incidente que desbordó los límites. En esa ocasión, el entonces alcalde arremetió verbalmente contra la oficial de la Policía Nacional, Nataly Rojas Rojas, a quien acusó de «calentar el asiento» y profirió una serie de insultos que derivaron en una querella por difamación.
Así fabricó su final
En medio de su enojo, Fernández disparó contra la oficial con comentarios denigrantes y hasta misóginos. «Póngase bien los pantalones», «póngase bien ese calzón», «póngase bien ese sostén», entre otras expresiones de contenido ofensivo. Incluso sugirió que las oficiales debían estar «en el VRAEM luchando como se requiere, no metidos en sus oficinas calentando ese asiento con «ese traserazo».
El incidente tuvo consecuencias judiciales inmediatas. En agosto de 2022, el Quinto Juzgado Penal Unipersonal de la Corte Superior de Justicia de La Libertad (CSJLL) dictó una sentencia condenatoria contra Fernández, imponiéndole una pena de un año de prisión suspendida por el delito de difamación agravada y obligándole a pagar una reparación civil de 5,000 soles.
No obstante, el exalcalde apeló la decisión, y en junio de 2023, la Segunda Sala Penal de Apelaciones ratificó la condena, aunque aumentó el monto de la reparación civil a 25,000 soles, lo que generó aún más repercusiones en su carrera política.
«De conformidad con lo que ya expuso el Jurado Nacional de Elecciones en este adelanto de su decisión, el señor Arturo Fernández está vacado definitivamente; es decir, no regresa al sillón municipal de Trujillo»
Camino a la suspensión y la vacancia
Este fallo judicial tuvo un impacto directo sobre la gestión de Fernández. En enero de 2024, tras la ratificación de la condena, el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) resolvió suspenderlo temporalmente de sus funciones como alcalde de Trujillo, y en su lugar, entregó las credenciales de alcalde provisional a Mario Reyna.
Finalmente, el pasado 12 de noviembre, el JNE emitió un pronunciamiento oficial en el que resolvió declarar fundado el recurso de apelación en su contra y, en consecuencia, confirmaba su vacancia como alcalde de Trujillo. El abogado Fernando Calderón Burgos, quien llevó la apelación en nombre de los denunciantes, expresó que el JNE simplemente cumplió con lo que establece la ley.
«La pretensión de mi apelación es que se revoque el acuerdo de concejo 87-2024, que rechaza el recurso de reconsideración y reformulando, declare la vacancia. La resolución del Jurado Nacional de Elecciones sale en ese sentido, fundada la apelación, revóquese el acuerdo y váquese al alcalde», explicó.
Sin regreso
Por su parte, el especialista en temas electorales Tomás Alva destacó que la decisión del JNE es definitiva e inapelable. «De conformidad con lo que ya expuso el Jurado Nacional de Elecciones en este adelanto de su decisión, el señor Arturo Fernández está vacado definitivamente; es decir, no regresa al sillón municipal de Trujillo», declaró.