Los gobiernos de la Unión Europea, y también el Reino Unido, están dando un giro en su política sobre Israel, que cada vez está más aislado. La guerra que libra en Gaza, que ha causado más de 53.000 muertos, gran parte de ellos niños, ha agotado la paciencia y tolerancia de los ciudadanos en Europa.
A pesar de que a muchos gobiernos europeos aún les cuesta condenar al gobierno de Benjamin Netanyahu, crece el repudio, sobre todo después de que este miércoles se diera a conocer que una delegación de diplomáticos europeos vio cómo el ejército israelí abría fuego contra ellos en Yenín.
Como se conoce, Israel libra una guerra contra una organización terrorista que atacó el 7 de octubre su territorio y causó más de mil muertos y secuestró a 250 personas. La condena de la masacre del 7 de octubre fue unánime. Sin embargo, la respuesta israelí ha sido brutal, pues se ha dedicado prácticamente a exterminar a los palestinos de Gaza.
Esta semana, el bloqueo a la llegada de ayuda humanitaria ha llevado a que por primera vez la Unión Europea se ponga a analizar si Israel cumple con el respeto a los derechos humanos fijado en el artículo 2 del Acuerdo de Asociación con la UE.
Hasta los exaliados
Esta vez, Países Bajos, que suele alinearse con Israel y es uno de los 11 Estados que no reconoce el Estado palestino, ha planteado la cuestión a la jefa de la diplomacia de la UE, la estonia Kaja Kallas. El ministro holandés de Exteriores, Caspar Veldencamp, plantea que el bloqueo a la ayuda humanitaria de los últimos tres meses supone una ruptura de la ley internacional.
Mientras tanto, este miércoles se conoció que en Israel alrededor del 67% de los ciudadanos apoya ahora el fin de las hostilidades.
Diecisiete Estados miembros respaldaron este martes la iniciativa de Países Bajos, entre ellos, Austria, Bélgica, Dinamarca, Eslovenia, Eslovaquia, España, Estonia, Finlandia, Francia, Irlanda, Luxemburgo, Malta, Polonia, Portugal, Rumanía y Suecia. Letonia se abstuvo. Alemania e Italia están entre los que se manifestaron en contra, según fuentes diplomáticas.
La medida llegó justo después de que el Reino Unido, la potencia que administró el protectorado de Palestina antes de la creación de Israel en 1948, congelara la negociación del acuerdo comercial con Israel y llamara a consultas a la embajadora israelí en Londres.
Netanyahu pierde apoyo en Israel
Mientras tanto, este miércoles se conoció que en Israel alrededor del 67% de los ciudadanos apoya ahora el fin de las hostilidades a cambio de la liberación de los 58 rehenes que quedan en el enclave, frente al 20,9% del principio del conflicto.
Ante la creciente presión, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se muestra dispuesto a un «alto el fuego temporal» para liberar a los secuestrados e insiste en que su Ejército controlará todo el enclave al término de la ofensiva.