Escribe: Víctor López
La contratación de Paolo Guerrero por parte del Club Deportivo Universidad César Vallejo fue una noticia que dio la vuelta al planeta fútbol por tratarse de uno de los centrodelanteros más completos de los últimos años y porque -según lo que dicen las informaciones- se ha convertido en el futbolista mejor pagado en la historia de la liga peruana.
Pero, ¿es el jugador más importante que ha llegado a un equipo de la región La Libertad? Existen dos casos anteriores que en su momento también revolucionaron el mercado de pases.
Un brasilero campeón del mundo en Mannucci
Moacyr Pinto, conocido como “Moa”, fue un mediocampista brasilero surgido de las divisiones menores de Flamengo, club con el que debutó profesionalmente en el Campeonato Carioca, para luego jugar internacionalmente en River Plate de Argentina y Peñarol de Uruguay, equipos en los que su rendimiento pasó casi desapercibido.
Moacyr, sin embargo, se coronó campeón del mundo a los 22 años en Suecia 1958 -y aunque no llegó a disputar ninguno de los partidos de esa competición- fue uno de los jugadores que mayor tiempo compartió con un joven Pelé de diecisiete años. Aquel fue el mayor logro de su carrera.
Moacyr Pinto llegó al Club Carlos A. Mannucci para la temporada de 1970, cuando el equipo militaba en Primera División. En el 72 el cuadro carlista perdió la categoría, por lo que “Moa” asumió la responsabilidad de director técnico para la Copa Perú de 1973, y aunque no logró el título, el equipo volvió a Primera División. El 74 jugó su última temporada en el club en calidad de jugador y director técnico. Recordado como un volante de buena técnica y con panorama de juego, es uno de los más grandes ídolos de Carlos A. Mannucci.
Con 40 años de edad recién cumplidos, y aunque en estos momentos no se encuentra al tope de sus condiciones físicas y futbolísticas, Guerrero confía en que todavía tiene mucho que brindarle al fútbol.
Un ex FC Barcelona en Pacasmayo
Hugo “El Cholo” Sotil se había retirado del fútbol a finales de 1980 en Deportivo Independiente de Medellín, sin embargo, volvió a las canchas para enrolarse en el Club Los Espartanos de Pacasmayo, luego de que el equipo ganara la Copa Perú de 1984. La contratación del “Cholo” fue un suceso importante para la época teniendo en cuenta de que se trataba de un mundialista, ex seleccionado nacional, campeón de la Copa América de 1975, ex jugador del FC Barcelona de España y además compadre de Johan Cruyff. Sin embargo, la estadía de Sotil en Pacasmayo fue corta: solo una temporada aunque dejó gratos recuerdos y anécdotas en su paso por el cuadro pacasmayino.
El mejor 9 del fútbol peruano en Vallejo
Paolo Guerrero, mundialista con la selección peruana y campeón del mundo de clubes con Corinthians, se terminó de formar en los juveniles de Bayern Munich con el legendario Gerd Müller, para luego iniciar una carrera de veinte años fuera del país en la que ganó títulos locales y copas internacionales en Alemania, Brasil y Ecuador.
Con cuarenta años de edad recién cumplidos, y aunque en estos momentos no se encuentra al tope de sus condiciones físicas y futbolísticas, Guerrero confía que todavía tiene mucho que brindarle al fútbol y esta temporada -que puede ser la última o la penúltima de su trayectoria- lo hará con la camiseta naranja de la Universidad César Vallejo.
Paolo Guerrero, qué duda cabe, es el fichaje más importante de la historia del fútbol liberteño, no solo por la categoría del futbolista sino por lo mediático de su fichaje, por la influencia que tendrá en el aficionado trujillano, por su capacidad de convocatoria -lo que está por corroborarse-, porque será la primera vez que juegue en el campeonato peruano (Liga1) y por la inevitable asociación de su imagen a la marca UCV. Guerrero -acostumbrado a ponerse como objetivo la máxima exigencia deportiva- quiere trascender en Vallejo y demostrarle a sus críticos que jugar en Trujillo es mejor opción que el retiro.
