El congresista de la república, Diego Bazán, ha estado muy activo estos días para pronunciarse en torno a los recientes asesinatos, robos, extorsiones y hasta secuestros que ocurren sobre todo en La Libertad, su región. Para el parlamentario, es momento de renunciar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para implementar la pena de muerte contra los delincuentes.
Según dijo el legislador liberteño, también urge apartarse de los tratados firmados con la OEA y la ONU, pues estos son impedimento para implantar la pena de muerte en el Perú.
«Renunciemos a algunos tratados… los cuales nos ponen candados para una serie de implementaciones, como es el caso de la pena de muerte en el país», señaló Bazán a los medios de comunicación de la región.
El padre de la patria añadió que en paralelo está trabajando en dos proyectos de ley; uno de ellos facilitará el ingreso a prisión preventiva a los delincuentes y el otro facultará calificar como ‘terrorismo urbano’ a los extorsionadores que arrojan dinamitas a los domicilios.
