Árbol
UN árbol viene a encontrarme
trayendo grabado mi primer corazón.
Escucho su verde palabra.
Pienso en su incólume altura,
en el mensaje vigoroso de sus ramas,
en la eterna amistad con los pájaros
o cuando suelta el canto disonante del búho.
Un árbol viene a encontrarme
para continuar de pie.
Arriero
TROTADOR insomne de rudos caminos,
tráenos el mapa de bosques y atalayas;
malos vientos quitaron las huellas
por donde pasaban los maizales
entonando la canción inmortal de los ríos.
Arriero,
con tesón de gualango
te dejo en cada ventana
el mapa con la ruta de los pájaros
hacia el alba.
Último canto
CUANDO nos toque cantar,
en una calle grande,
o en una gran plaza,
o, simplemente, entre las últimas hierbas del camino,
sabremos que nuestro corazón estará
crecido
fuerte
y anchuroso,
ya sin ninguna tristeza.
Camilo Gil García
Nació en 1943. Ha sido docente en el departamento de Filosofía y Arte de la Universidad Nacional de Trujillo. Pertenece al Grupo Literario Greda, que lleva 40 años de ininterrumpida labor poética. Ha publicado el libro “Caminante erguido”.