Mediante un operativo, personal de la empresa Hidrandina constató el hurto de energía por parte del restaurante Sunkella y de cinco viviendas, en el distrito de Huanchaco, cuyos propietarios evadían el pago del consumo real de luz eléctrica. Para tener energía eléctrica usaban conexiones trifásicas clandestinas y la manipulación de los sistemas de medición.
El personal técnico de Hidrandina S.A. evidenció este ilícito penal mientras inspeccionaba el sistema de medición del restaurante turístico Sunkella, determinando que, en el suministro, con código 64474383, existió vulneración bajo la modalidad de puente interno en placa madre (tarjeta electrónica) del medidor electrónico.
Asimismo, en la Cevichería “Limón Picante”, se encontró una vulneración en el medidor, bajo la modalidad de puente interno. En el Sector Mirador El Tablazo, en un suministro provisional, se encontró el medidor manipulado en 02 fases internas, el mismo que distribuye energía a todo el sector que cuenta con 300 pobladores aproximadamente.
Más robo de energía
De otro lado, en el asentamiento humano Las Lomas se verificó que en tres predios (una panadería, una cevichería y una vivienda), también operaban con conexiones que evidenciaban la vulneración a los dispositivos que miden el consumo de luz.
Ante esta situación, Hidrandina ha iniciado los procesos administrativos sancionadores como el recupero de energía por el concepto de luz no facturado.
La empresa recuerda que el hurto de energía está considerado, en el ordenamiento jurídico vigente, como un delito, pues se atenta contra la seguridad pública al realizar conexiones ilegales a la red eléctrica, manipular y/o alterar los equipos de medición o intervenir en la conexión de empalme con el fin de evitar el registro del medidor de electricidad. Este acto tiene como consecuencias desde el pago por la energía robada, hasta la pena de cárcel para los autores.